Carbonero garrapinos.
Concretamente en la mañana del 31 de diciembre un grupito de 7 ejemplares de acentores alpinos se encontraban alimentándose en el suelo al pie de un roquedo de modestas dimensiones en la ladera norte del pico Ropé en el término municipal de Chera. Muy confiados, recorrían el terreno entre piedras sueltas y con algún arbusto disperso en un área montañosa próxima a los 1000 metros de altura principalmente cubierta de pinares laxos de Pinus halepensis. Es una observación muy interesante que confirma la querencia de este paraje por la especie, ya que no es la primera temporada que se cita aquí.
Mito
Por otro lado, durante la misma jornada, pero en los mosaicos agroforestales del entorno de Villar de Tejas, ya en el término de Chelva ciertas densidades de zorzales, entre los que dominaba el charlo Turdus viscivorus y el común Turdus philomelos. no obstante, también pude confirmar la presencia de al menos tres ejemplares de zorzal alirrojo Turdus iliacus, mucho menos habitual en la comarca. Esta especie se presenta en la demarcación en menor número que las otras, aunque localmente puede llegar a ser incluso abundante. sus territorios de cría están en la lejana taiga, o bosque de coníferas, del norte de Europa (desde Escandinavia hasta Rusia) y es en los meses más fríos del invierno cuando se generaliza su presencia en nuestra demarcación.
Otras aves vistas en los recorridos ornitológicos por estos montes fueron el herrerillo común Cyanister caeruleus, el escribano soteño Emberiza cia, el pico picapinos Dendrocopos major y el reyezuelo listado Regulus ignicapillus, entre muchas otras especies, y que pusieron una nota de color y vivacidad a unos parajes sobríos de por sí.
Javier Armero Iranzo
Fotos Rafa Muñoz, FONS FOTOGRÀFIC SVO.
Fotos Rafa Muñoz, FONS FOTOGRÀFIC SVO.