CENSO DE AVES INVERNANTES

Mito (Aegithalos caudatus)


16.11.08

Este domingo comenzaba el Censo de Invernantes de SEO/BirdLife. Mi cuadrícula es la de La Portera zona que conozco intensamente desde 1992. Salí de la aldea dirección norte haciendo los recorridos de 15 minutos en los que tomamos nota de todas las aves detectadas separándolas en franjas de mayor o menor de distancia a 25 metros al observador. Con este censo se pretende dar constancia de la evolución y densidad de las aves invernantes de España.


Eran las 8 de una fría mañana de domingo con apenas 3ºC. Desde las antenas de TV los estorninos pintos (Sturnus vulgaris) invernantes y los negros (Sturnus unicolor) sedentarios cantaban calentándose con los primeros rayos de sol, les acompañaban otros sedentarios habituales, los gorriones comunes (Passer domesticus) más activos en estas horas. En cuanto dejé la aldea las primeras viñas albergaban un pinzón vulgar (Fringilla coelebs), una curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala) al abrigo de unas coscojas y un par de zorzales charlos (Turdus viscivorus).


Los mal llamados Cerros Pelados, ya que actualmente tienen una buena pinada, albergaban una familia de arrendajos (Garrulus glandarius), totovías (Lullula arborea) y una lavandera blanca (Motacilla alba) que buscaba alimento entre los lodos de la pequeña depuradora.


En la dehesa del Llano un pito real (Picus viridis) protestó al tener que buscar cobijo ante mi presencia. Las cogujadas comunes (Galerida cristata) cantaban también al levantarse mientras los verdecillos (Serinus serinus) abandonaban su deambular por rala hierba en busca de semillas esperando que me alejara. Un alcaudón meridional (Lanius meridionalis) en lo alto de su percha esperaba algo que cazar mientras un escribano montesino (Emberiza cia) se alejaba de allí. Un disparo al fondo levantó de unos almendros un grupo de zorzales comunes (Turdus philomelos).


Herrerillo capuchino (Lophophanes cristatus)


En las Casas del Llano se soleaba un colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros) mientras en un baldío próximo lleno de cardos se concentraban jilgueros (Carduelis carduelis), pardillos (Carduelis cannabina) y verderones (Carduelis chloris) en busca de su desayuno. Un bisbita común (Anthus pratensis) esperó desde un almendro que me marchara. Todos desaparecieron al pasar dos cernícalos comunes (Falco tinnunculus).


Pasadas las faldas del Cerro Don Gil entré en la hoya de La Alcuza, aquí los pinares predominan mientras que algunas viñas, ya desnudas, se refugian en el fondo de los vallejos. Levanté dos perdices (Alectoris rufa) que buscan amparo en el monte más espeso en estos primeros días de caza en los que un paseo por el monte está lleno de disparos que rompen la habitual tranquilidad. Unos metros más y tuve una fugaz visión de uno de los reyes de esta zona, un gavilán (Accipiter nisus). Enseguida me sorprendió la visión de un ratonero (Buteo buteo) cicleando en uno de los cazaderos habituales de las águilas reales (Aquila chrysaetos) verdaderas reinas de estos parajes. ¡que lleve cuidado! Todos estos pensamientos los rompió una humilde curruca rabilarga (Sylvia undata) que cantó desde lo alto de una coscoja.


El pinar se espesaba y otras aves llamaron mi atención. Primero el reclamo de un petirrojo (Erithacus rubecula) y más tarde el típico grito de alarma de un mirlo (Turdus merula) para avisar al resto del bosque de la presencia de un extraño.


Dentro ya del pinar, en las estribaciones de La Serratilla, los páridos alegraban la entonces atemperada mañana, un grupo de mitos (Aegithalos caudatus) acompañados de carbonero común (Parus major), carbonero garrapinos (Periparus ater) y herrerillos capuchinos (Lophophanes cristatus) que reclamaban para mantener la unidad de esos grupos mixtos que vagan entre las ramas de los pinos en caótica procesión que busca de pequeños insectos con los que alimentarse. El que más me costó detectar fue el agateador común (Certhia brachydactyla) pero al final no faltó.


Chozo de piedra en La Serratilla, La Portera.


Enseguida descubrí un antiguo chozo de piedra, siempre encuentro sorpresas en cuanto me salgo de mis recorridos habituales. Esta pequeña sierra esconde algún bunker y trincheras de la guerra civil así como antiguas canteras, pero desconocía la existencia de antiguas construcciones agrícolas como esta. Para mi siempre es un placer un paseo matutino entre especies habituales de los inviernos de estas hermosas tierras.


Por la tarde en una breve escapada a la balsa de El Pontón encontré dos agachadizas comunes (Gallinago gallinago) que acompañaban a las habituales en estas fechas fochas comunes (Fulica atra), zampulllines chicos (Tachybaptus ruficollis) y avefrías (Vanellus vanellus). También pude observar mis primeros escribanos palustres (Emberiza schoeniclus) de esta invernada.


Mensaje de Rafa Muñoz en el FORO SVO Aves.
Fotos de Rafa Muñoz, FONS FOTOGRÀFIC SVO

No hay comentarios: